miércoles, 22 de octubre de 2014

Terra Mystica

Un "euro" lleno de contadores y puntuaciones.
No muy soprendente pero bien hecho.

Hola de nuevo. Ayer pude probar el Terra Mystica, que actualmente ocupa el tercer puesto en la lista de los mejor puntuados en Board Game Geek así que las expectativas eran buenas.

La premisa y las mecánicas difícilmente sorprenderán a los veteranos del eurogame pero está bien llevado a cabo y parece que puede dar muchas horas de interesantes conflictos.

Para empezar cada jugador escoge una facción. Todas son muy similares pero tienen habilidades especiales que las diferencian y que pueden condicionar nuestra estrategia.

Tenemos un mapa dividido en hexágonos, cada uno de los cuales representa un tipo de terreno, sobre el que tendremos que competir por el espacio con el resto de jugadores.
Nuestra facción sólo puede construir sobre un tipo de terreno, así que tendremos que gastar recursos para transformar el territorio.
Para expandirnos debemos construir nuestros edificios (moradas, puestos comerciales, templos y los poderosos santuario y fortaleza) gastando más recursos.
Estos edificios producen distintos recursos a principio de turno… Ya os imagináis por dónde va el tema.

La imagen debería resultar autoexplicativa para los más veteranos.

Terra Mystica apuesta por usar multitud de pequeños bonos, fuentes de puntos de victoria, recursos y acciones haciéndolo relativamente complejo. Manejamos dinero, trabajadores, puntos de poder, sacerdotes, construimos puentes y ciudades, mejoramos nuestra construcción o nuestra navegación y tratamos de ocupar la mayor porción de territorio posible mientras avanzamos en el culto a dioses.
Todo esto, junto con diversas losetas (unas fijas y otras seleccionables), nos da puntos de victoria y mejora nuestra producción y habilidades.
Quien mejor sepa combinar todas las diferentes mecánicas y optimizar el momento en el que realizar cada acción y construir cada edificio será quien se lleve el gato al agua.

Las mecánicas no son complicadas per se pero hay muchas y pueden abrumar a los jugadores menos expertos o causar una cierta confusión en las primeras partidas.
La interacción entre los jugadores es indirecta pero intensa. Bloquear la acción que alguien necesita o el terreno que pretendía ocupar sobre el tablero puede suponer la diferencia entre el éxito y el fracaso más rotundo. Más aún, es más barato construir puestos comerciales adyacentes a otros jugadores y cuando otros jugadores construyen junto a nosotros podemos ganar puntos de poder.
La cercanía de los oponentes es tan útil como peligrosa.

El tablero (vacío) de las Sirenas. Mucha información pero independiente del idioma.

En general resulta un juego bastante abstracto y puede resultar peligrosamente propenso tanto al análisis parálisis como a la frustración, así que cuidado con quién jugais :P
De todas formas la impresión de la primera partida fue bastante positiva y pareció bastante recomendable para cualquier aficionado a la gestión de recursos, ya que no resultó difícil encajar las innumerables piezas y enseguida pudimos ponernos a planear distintas estrategias para una futurible segunda partida.

Para probar por los jugones más cerebrales.

Hasta otra.

lunes, 20 de octubre de 2014

Cita: El mal menor - Sapkowski

Hola, hoy me ha dado por poneros una cita literaria, que puede no ser muy elegante, pero me resultó divertida. Igual os pongo más citas literarias conforme me vaya encontrando más perlas de sabiduría.


“El brujo se había encontrado en su vida a ladrones que parecían concejales, a concejales que parecían mendigos, a meretrices que parecían princesas, a princesas que parecían vacas preñadas y a reyes que parecían ladrones.”

“El mal menor”, Andrzej Sapkowski


Rigurosamente cierto y no por ser un hecho conocido deja de tener una sabiduría detrás.

Ejemplo del ingenioso y colorido lenguaje del escritor polaco, creador de Geralt de Rivia.
Además es una forma extremadamente pintoresca de decir: “En su vida había visto de todo”, y la forma en la que nos deja creer que va a repetir a las “meretrices” para sorprendernos con las “vacas” me parece un golpe maestro.


P.D: en la traducción española no pone “mendigos” sino “abueletes normales y corrientes” pero parece ser que la traducción más literal sería esta que os he puesto.


sábado, 18 de octubre de 2014

Batman - Christopher Nolan

Un símbolo para sembrar el terror en los criminales.

Hola a todos. Últimamente he podido repasar algunas películas y hoy os traigo uno de los pelotazos de la última década, la trilogía de Batman que dirigió Christopher Nolan y encarnó Christian Bale. A saber: “Batman Begins”, “The Dark Knight” y “The Dark Knight Rises”.

Como siempre, lo primero que he de mencionar es que nunca he seguido el cómic, así que todos mis conocimientos al respecto vienen de las anteriores películas y los videojuegos (especialmente los muy notables Arkham Asylum y Arkham City).

De aquí no puede salir nada bueno.
Respecto a las anteriores películas vamos a romper una lanza en favor de las dirigidas por Tim Burton, “Batman” y “Batman Returns”, que se ven con agrado y tienen una estética muy nocturna y gótica (he encontrado gente que las prefiere a las de Nolan).
También  como todo el mundo espera, vamos a darle palitroque a las de Schumacher, “Batman Forever” y la infumable “Batman & Robin”, que resultan muy inferiores a todo el resto de películas. Si os las queréis saltar no pasa nada.

Viniendo del histriónico fiasco estas últimas se vio claramente que la serie necesitaba un nuevo comienzo desde cero y se marcó un tono mucho más realista, oscuro y humano.
Realista hasta el punto de que es fácil olvidar que se trata de una historia de superhéroes. En la serie de X-Men los saltos en el tiempo, la teleportación o las descargas de energía son moneda de uso común, pero en este Batman algunos elementos de ciencia ficción, como el Batwing, pueden llegar chirriaros un poco por el contraste con lo cotidiano que resulta todo. Batman es un ninja con gadgets, Lobezno es algo completamente distinto.

Tiempos distintos. Distintas interpretaciones de un mismo personaje.

Una vez marcado el tono no os sorprenderá ver a Batman relativamente poco tiempo en pantalla, especialmente en la tercera entrega, “The Dark Knight Rises”. Esta es una historia acerca de personas y Bruce Wayne tiene más importancia que su alter ego.
Bruce Wayne es una persona que tiene miedo (el miedo es uno de los temas fundamentales de “Batman Begins”), ama (“The Dark Knight”), sufre (“T. D. K. Rises”) y el cómo se enfrenta a todo ello es lo que le da a la historia sentido, significado y la fuerza.
Cierto, ver a Batman tumbar a diez matones a la vez o al Batmobile llevarse por delante a un camión siempre mola, pero no son películas de acción pura. Si esperáis ver algo como “Dredd” vais a salir decepcionados (“Dredd” la de Karl Urban, no os equivoquéis y veáis la de Stallone).
Tampoco esperéis ver aquí el humor ligero típico de la Marvel. Aquí hay humor y me funciona bien, pero pero resulta más moderado en la mayoría de los casos, para encajar mejor en el ambiente de la serie.

Por supuesto que tendréis acción, peleas, persecucciones, tiroteos, etc.

Además de tratar de dar profundidad a los personajes se añade una cierta complejidad argumental, muy característica del cine de Nolan, que a veces nos acerca a los clásicos de noir por su legión de personajes y conspiraciones.
Esto hace que las pelis se alarguen (duran entre 140 y 165 minutos, que ya son minutos), que resulta más de lo debido.
Si juntamos la duración, la densidad argumental y el dinámico estilo del director, que no es de los que nos dan respiros de 30 segundos de travelling por un parque, hace que puedan resultar un poco espesas y abrumadoras (sobre todo si además estás tirando de subtítulos, como espero que hagáis salvo que ya no os hagan falta).

También hemos de mencionar que no todas las partes del argumento encajan como sería deseable, especialmente en el último acto de “The Dark Knight” donde aparentemente los ciudadanos de Gotham se ven invadidos por un espíritu de nobleza y sacrificio digno de encomio pero que resulta poco creíble (me refiero a los del barco) o la decisión final de Batman de cargar con la culpa (puestos a mentir, ¿no hay en la ciudad criminales de sobra que carguen con el muerto?).
El romance, con su agonía y su éxtasis, es fundamental en la serie.

De todas formas aquí hay un trabajo bien hecho y con muchos medios. Huelga decir que técnicamente está muy bien y se nota que había presupuesto para rodearse de gente notable, como Christian Bale (el mejor Batman hasta ahora), Joseph Gordon-Lewitt o Anne Hathaway; viejos amigos como Liam Neeson o Morgan Freeman; o marcarse el lujazo de tener de secundarios a Gary Oldman o Sir Michael Caine. Ahí es nada.
Mención especial a la reinterpretación del Joker. Curioso que en las dos películas donde aparece prácticamente se corona como rey del film, pero tengamos en cuenta que le vemos como una nota de color, locura e incluso humor frente a un personaje tan sombrío y moralmente rígido como Batman. No es de extrañar que nos llame la atención.
Si a esto le sumamos estupendas interpretaciones por parte de Jack Nicholson y Heath Ledger...

Lo mires por donde lo mires será el rey de la fiesta.

En definitiva. ¿La mejor serie de superhéroes hasta el momento? Prácticamente sin duda, pero eso no implica que sea perfecta ni mucho menos. La duración desmesurada y algunas inconsistencias la alejan de la perfección.
Si os van los superhéroes seguro que ya las habéis visto pero si no os va el rollo “súper” podéis enfocarlas como películas de cine negro de acción, con dosis de ciencia ficción moderada y sacarles partido. No os arrepentiréis (o sí, pero no aceptaré ninguna responsabilidad :P).

Hasta la próxima.

jueves, 16 de octubre de 2014

16 de octubre y turrón

He borrado las marcas por si no se podían publicar (aunque dudo que le importe a nadie).
El turrón es muy bueno, por cierto.

Hola de nuevo. Hoy, 16 de octubre y con 30º en el termómetro, he visto los primeros turrones del año. No sé si llevarán muchos días a la venta, pero verlos me ha sugerido lo siguiente.

Los turrones son un dulce típicamente navideño. Sacarlos de esa época, y desde luego no considero que esta sea una fecha navideña, es quitarles todo el significado que pudieran tener. 

Por otro lado son un dulce riquísimo y con una variedad casi infinita así que, ya despojados de las connotaciones navideñas, propongo que se vendan todo el año y no que tengamos que esperar al otoño-invierno para poder disfrutarlos.
Seguro que hay unas variedades básicas que podrían tener venta independientemente de las fechas. Conozco gente que se abonaría al de chocolate sin dudarlo.

No nos quedemos a medias. Si creemos en la Navidad, creemos y si no, vamos a quitarnos la máscara y a actuar en consecuencia.

Tonterías que se le ocurren a la gente. Hasta la próxima.

jueves, 9 de octubre de 2014

El dragón del lago de fuego

"En la Edad Oscura
La magia era un arma
El amor era un misterio
La aventura estaba en todas partes...
y los dragones eran reales"

Hola de nuevo. Tras la estela de “Taron y el caldero mágico” me he lanzado a revisar uno de los clásicos de mi infancia, “El dragón del lago de fuego” (título original: “Dragonslayer”, o sea, “Matadragones”).
Se trata de una coproducción Disney/Paramount pero, como “Taron…” esta cinta resulta un poco más oscura de lo que esperamos al ver el sello del ratón.

¿De qué va esto? Un dragón es el azote del reino y, para mantenerlo apaciguado, se le ofrece cada seis meses el sacrificio de una doncella elegida por sorteo.
Un grupo de campesinos, comprensiblemente hartos del riesgo para sus hijas, acuden a contratar a uno de los últimos magos que quedan en el reino pero este digamos que queda indispuesto para la misión y es relevado por su aprendiz.
Esta es la historia de la titánica pugna entre Galen Bradwarden, aprendiz de hechicero, y Vermithrax Pejorative, dragón con muy mala uva.

Vermithrax en toda su gloria.

Como ya os he dicho lo primero que puede llamaros la atención es el tono ligeramente más oscuro que tiene la película, lo que la convierte en una historia más juvenil que infantil. Tenemos una cierta cantidad de violencia, gente ardiendo, dragoncillos devorando cadáveres con sorprendente detalle y unos fugaces desnudos.

Uno de los temas que no esperaba encontrar es la sustitución del paganismo por el cristianismo.
El paganismo viene representado por los hechiceros, la magia y el dragón, y el cristianismo viene a esta representado por unos oportunistas que se aprovechan del miedo de la gente para medrar pero que no aportan ninguna solución real.
A todo esto el rey viene a aparecer en un tono similar así que podemos considerar que la historia critica a los poderes tradicionales, que tratan más de cuidar de sí mismo que de sus súbditos.
En definitiva, el miedo y sus efectos es muy importante en el desarrollo de la historia.

Por lo demás tampoco es que os vayáis a encontrar muchísimas sorpresas en el desarrollo, al fin y al cabo es una historia de caballero contra el dragón, salvo que no hay ni brillante armadura ni doncella de porcelana. Todo es un poco más realista, más cercano y, para mí, más interesante.
Una de las supuestas sorpresas es que sale una mujer disfrazada de hombre, pero si alguien no la ha descubierto en menos de 5 segundos debería pagar la cena.

Además de dragones también encontraremos bonitos paisajes.

En el aspecto visual, los paisajes son muy bonitos (Gales y un poco de Escocia, creo) y los efectos son buenos para la época (nominados al Oscar) pero pueden resultar un tanto anticuados para los espectadores modernos, especialmente cuando aparecen figuras superpuestas en pantalla.
He de decir que Vermithrax me gusta. Me gusta ver que es un modelo físico y no un dragón por ordenador que no da ninguna impresión de solidez.
Me gusta cómo se juega con mostrarlo poco a poco, pero mantenerlo oculto la mayor parte del tiempo. Le da un cierto misterio que le viene muy bien.

En cuanto al ritmo, yo recordaba que se me hizo un poco larga allá en mis años mozos. Ahora también creo que es un poco lenta para lo que nos tienen acostumbrados, con planos de medio segundo y sobrecarga de acción, pero no me molestó. Es sólo otra forma de narrar las historias.
Si sois adrenalinofílicos momentos como la gran batalla final se os harán lentos, pero me parece que así era el cine de los 80. Paciencia, disfrutad de las imágenes y reflexionad sobre lo que están contando.

Nuestro protagonista no tiene mucho aspecto de héroe de leyenda. Yo creo que el peinado no ayuda.

Por último, un protagonista con algo más de carisma creo que le hubiera venido bien pero también es cierto que le da un toque un tanto antiheroico que encaja con el tono general de la película. Ya es cuestión de gustos.
Ah, y hay un momento donde la heroína que ha mantenido el tipo toda la película pierde los nervios sin venir muy bien a qué. Pequeños detalles que se podrían haber pulido.

En definitiva yo recomendaría la película a todo aficionado al género que no necesite ver un “20-hit combo” para disfrutar de una historia de magia y dragones.


Hasta la próxima.

miércoles, 1 de octubre de 2014

Taron y el caldero mágico

Spectacular, lo que se dice spectacular... tampoco es.

Hola a todos. Después del fiasco de "La bella durmiente" me lancé a ver "Taron y el caldero mágico", que había leido que era bastante más oscura de lo habitual en Disney.

Creo que ya dije en su día que "Taron y el caldero mágico" se titula realmente "The Black Cauldron" (El caldero negro) y Taron se llama Taran, con "a". Cosas que pasan.

Por lo que había podido leer muchos la consideran de las peores cintas de Disney y he de decir que temáticamente me parece un avance respecto al encefalograma plano de Aurora pero narrativamente estoy por darles la razón.

Por el principio, por lo que nos cuenta la Wikipedia (fuente de todo conocimiento verdadero, ¡alabada sea!) la película está inspirada en una serie de libros basados a su vez en la mitología galesa.

El Rey del Mal (en inglés, The Horned King) está buscando el Caldero Negro, con el que se puede reanimar a los muertos, para levantar a su ejército de muertos vivientes y hacerse con el reino de Prydain.
Para ello necesita a Hen Wen, la cerda clarividente de la que cuida Taran, un joven porquero con ínfulas de héroe. Sí, una cerda clarividente. Igual es cosa del folclore anglosajón.
Total, que Taran irá a buscarla al castillo del Rey del Mal y ya tenemos la aventura servida.

Todo el mundo sabe que las cerdas se preocupan en hacerse las pestañas.

A lo largo de la historia encontrará, como no puede ser de otra forma, diversos personajes como la princesa Eilonwy, el viejo bardo Fflewddur Fflam y Gurgi, una cosa peluda que busca hacer nuevas amistades.
Si os molestáis en buscar información acerca de los libros de "Las crónicas de Prydain" encontraréis que estos personajes tienen algo más de trasfondo de lo que la película nos muestra, que es nada, para que decir otra cosa.

¿Por qué Taran vive con un mago?, ¿es huérfano?, ¿por qué la cerda es clarividente?, ¿eso es normal?, ¿Eilonwy es princesa de dónde?, ¿qué es su burbuja mágica y luminosa?, ¿de dónde viene Fflewddur?, ¿qué pinta en todo esto?, ¿es Gurgi un troll piloso, un duendecillo hippie o un enano que sufre hipertricosis?, ¿hay más de su especie?, ¿dónde?, ¿y la espada mágica?, ¿y las brujas?, ¿y las hadas?, ¿y el Rey del Mal?

Si no te haces ninguna pregunta mientras ves la película quizá no se note tanto, pero me pareció que la historia estaba contada a hachazos. Si en vez de tratar de maravillarnos visualmente con hadas y castillos siniestros hubieran llenado los huecos con información y hubieran hilado mejor la acción no se me hubiera hecho tan lenta. Tal cual está... no está bien contada.

El ejército del Rey del Mal, renacido del caldero.

Por otro lado he de agradecer que haya pequeños avances como que cuando Taran está preso es Eilonwy la que le rescata a él. A estas alturas yo a esto no le daría la menor importancia, pero después de Aurora...
El tono es mucho más oscuro de lo habitual en Disney, me recordó a "Dragonslayer" (El dragón del lago de fuego), aunque ya hace muchos años que la vi y puedo equivocarme. Hay muchos esqueletos, dragones, brujas, muertos vivientes, mazmorras y alguna muerte. Evidentemente no "La noche de los muertos vivientes" pero no resulta tan ñoña como otras (salvo por algunos destellos esporádicos).
La reducción de ñoñería también lo considero un avance.

Ejemplo de destello de ñoñería.

En definitiva, sólo la recomendaría para ver el lado más oscuro de esta casa de animación, pero como película no me pareció gran cosa. Podéis encontrarlas mucho mejores sin gran esfuerzo.

Hasta la próxima.