martes, 29 de julio de 2014

El amanecer del planeta de los simios

Hay algo más interesante aún que un chimpancé a caballo con un fusil de asalto (¡y ya es difícil ser más interesante!)
la historia que hay detrás y su conexión con la vida real.

Hola de nuevo. Junto con "Las dos caras de enero" pudimos ver "El amanecer del planeta de los simios" ("Dawn of the Planet of the Apes"; otra traducción literal (¡dos de dos!)) que procedo a comentar.

Esta continúa desde donde se quedó la más que aceptable "El origen del planeta de los simios" (que retomaba y reiniciaba la clásica saga de "El planeta de los simios") y los simios están formando ya su propia cultura, alejada de la humanidad.
Pero los humanos tienen que iniciar la exploración en busca de ciertos recursos y el encuentro entre estas dos civilizaciones es inevitable. La interacción entre las dos especies será el motor principal de la película.

¿Cuál es la reacción de un grupo de gente ante otro grupo de personas? ¿Miedo, curiosidad, colaboración, "matadlos a todos, por si acaso"? ¿Pueden coexistir dos culturas distintas o están condenadas al choque de civilizaciones?
Todas son preguntas muy interesantes, pero me temo que un vistazo a las noticias internacionales de cualquier periódico nos revelará las respuestas más claramente que cualquier película.

El entendimiento no es imposible pero, a juzgar por lo visto en el Telediario, debe de ser extremadamente complicado...
Por otro lado también exploraremos las relaciones familiares, especialmente las paterno-filiales (¡qué complicada es esa adolescencia!), y la naturaleza del poder y el liderazgo, por poner un par de ejemplos.
Ah, y a juzgar por el aspecto del hogar de los simios y el de los seres humanos yo diría que un cierto ecologismo también tenemos por aquí.

Lo que me vas a costar de criar, hijo mío.
Vamos, que es una película más profunda y que cuenta más cosas de lo que se podría imaginar viendo el cartel con un simio a caballo con un fusil de asalto. Eso es lo que le pedimos a cualquier película pero géneros como la fantasía o la ciencia ficción muchas veces lo olvidan. Por suerte esta vez no ha sido así y tenemos una historia detrás que nos habla de lo que vemos todos los días.

Si bien se me hizo un poco larga (130 minutos) también es cierto que el ritmo no decae y se alternan partes de acción (especialmente toda la parte final) con partes más sentimentales sin que lleguen a abrumar ni unas ni otras. En ese aspecto yo creo que está rodada con habilidad.

Y por ponerle algún pero yo diría que es demasiado fácil separar a los personajes en "buenos" y "malos". Está claro que hay gente "buena" y "mala", pero no es algo que se vea a simple vista y mucho menos en un ámbito tan complicado como las relaciones internacionales.
Aquí vemos en menos de diez segundos que "este humano está menospreciando injustamente a los simios" o "este simio está consumido por el odio y va a dar problemas".

No lo dudéis. Si tienen cara de malos es que son malos.
Si conocéis "El planeta de los simios" (la original) podréis imaginar fácilmente por dónde van los tiros y cómo va a ser la resolución de casi toda la película, pero eso no quita que sea una cinta entretenida e interesante a partes iguales, de las que dignifican el blockbuster y que vale la pena ver.

Si os gustó "El origen..." no hay ningún motivo para que no veáis "El amanecer...".
Si no habéis visto "El origen..." os recomiendo que veáis las dos, que valen la pena.
Esperaremos a ver la tercera parte dentro de un par de años, a ver si mantiene el nivel.

Un saludo y a ver buen cine.

sábado, 26 de julio de 2014

Las dos caras de enero



Hola a todos. El otro día sesión doble en el autocine, así que vengo dispuesto a contaros las películas. Empezaré por "Las dos caras de enero" ("The Two Faces of January", en el original (¡traducción literal, increíble")).

Esta película está basada en una novela de la conocida autora Patricia Highsmith a la que conoceréis por "Extraños en un tren" o "El talento de Mr. Ripley", y sigue la misma tónica de thriller psicológico y mundillo criminal.

En este caso tenemos un timador (Viggo Mortensen) y su mujer (Kirsten Dunst) huyendo por Grecia de gente que está muy enfadada con él en los EEUU, y un guía turístico (Oscar Isaac), no menos timador que el anterior, que tratará de sacar tajada de la situación.

Visto así os puede parecer la película donde todo el mundo engaña a todo el mundo, la película engaña al espectador y al final todos se soprenden y la sala se echa las manos a la cabeza estupefacta.
Nada más lejos de la realidad. Esta es una película muy pausada, sin prisas y sin estridencias, lo que provocó que no fuera bien recibida por el respetable cuando la vimos, pero que no me pareció una mala película.

Como siempre, tres son multitud.
En mi modesta opinión una película es mala cuando no cuenta nada ("Conan (2011)" o "Sucker Punch" son buenos ejemplos) y en esta pasan muchas cosas. Tenemos pequeños timos, falsificaciones, muertes, un matrimonio que se derrumba (y un tercero en discordia), un hombre que se autodestruye con alcohol y la extraña relación paterno-filial que se establece entre los dos protagonistas, que vendrá a ser uno de los motores principales de la historia.
Como veis cuenta cosas, pero como ya he comentado, las cuenta de forma muy pausada, en un estilo que me recuerda a cintas como "El topo" ("Tinker Taylor Soldier Spy") donde te cuentan un crimen como quien relata una partida de ajedrez.
¿Eso es malo? Pues depende del gusto de cada cual.

A mí no me disgustó, aunque creo que si la hubiera cogido un Hitchcock, por ejemplo, la película te atraparía mucho más y, tal cual está, puede parecer demasiado fría para estar contando una historia tan llena de sentimientos turbulentos y tragedias.

Y eso es lo que vimos. Una película correcta, interpretaciones convincentes, bonitos paisajes mediterráneos y una historia que quizá merecía más, todo ello a expensas de la paciencia del espectador.
Si lo que te interesa es ver "Transformers" ni te acerques a esta película...

Hasta la próxima.

El dios Jano.
P.D.: el título hace referencia al dios romano Jano, que tenía dos caras, una mirando al pasado y otra al futuro. Era dios de los principios, los finales y los conflictos. Todo ello temas que podemos encontrar en esta historia.
El mes de enero toma su nombre de este dios.

martes, 22 de julio de 2014

Kiwi!

*** Spoiler alert ***

Hola a todos. Hoy os traigo un corto que fue presentado por Dony Permedi (estudiante que no tengo el gusto de conocer) como tesis para su Máster en animación.

A mí me hablaron del corto el año pasado, aunque fue creado en 2006, y le di unas cuantas vueltas, pero el otro día volví a escuchar que alguien hablaba de él y me decidí a contaros lo que me parece.

Como el corto se puede encontrar sin ninguna dificultad en YouTube (buscad "Kiwi" y será lo primero que aparezca) supondré que ya lo habéis visto y me salto la presentación para lanzarme al resultado.

Como habéis visto el corto mezcla muy hábilmente las imágenes de un kiwi monísimo con una música primero cómica y luego sentimental para crear un ambiente realmente emotivo. Y todo quedaría en un mensaje facilón aunque preciosista hasta que llegamos al final.

Primero punto, leí que el amigo Permedi insiste en que es un final abierto. El kiwi desaparece en la niebla, se oye un ruido y lo que haya pasado lo estamos poniendo nosotros de nuestra cosecha.
Aunque todo parece indicar lo contrario no tengo más remedio que darle la razón.

Primero, puede tener razón. ¿Nunca os ha pasado en el día a día que algo parecía una cosa y luego era otra? ¿Nunca habéis malinterpretado una mirada, un gesto, un comentario porque parecía una cosa y luego era otra?
Aquí lo mismo. Hemos de reconocer que parece que se da la gran galleta, pero no lo vemos. El ruido parece indicar galleta, pero podría ser cualquier otra cosa.

Por otro lado, cuestión de lógica. ¿Un kiwi organiza un trabajo de ingeniería que ni el Canal de Panamá y luego se olvida de usar un paracaídas, poner una red o una colchoneta gigante? Sería una grave incongruencia ya que no tendría mucho sentido que se le hubiera pasado por alto. El vídeo perdería algunos puntos.

¿Y si no se le ha pasado por alto? ¿Suicidio? ¿Se ha suicidado sólo para poder fingir un vuelo? ¿Ese es el mensaje que trata de transmitir? ¿Engañate lo suficiente como para soñar y ser feliz un momento y entonces muere, porque no podrás enfrentarte al dolor de despertar y darte cuenta de que eres un kiwi y no puedes volar? ¿De qué clase de pesimismo radical estamos hablando?
Si ese fuera el mensaje el vídeo perdería todo su valor. He de decir que estoy convencido de que no trata de decir esto, pero sería una de las conclusiones lógicas a las que podríamos llegar.

Otra de las opciones que se me ocurre es que no ha tratado de transmitir ningún mensaje con este final, sino que decidió sobrecoger al espectador con una sorpresa final de lo más triste, pero sin otra razón que dar la sorpresa.
Impactar por impactar no tiene ningún valor (ahí tenemos las malas películas de terror, impactan, pero no dicen nada).

Por último se me ocurre la opción más interesante. Hizo ese final precisamente para que le diéramos vueltas y escribiéramos reflexiones como esta (bueno, las buscaría mejores, pero no doy para mucho más :).
Para mí, ¿cómo no va a ser un final abierto si acabo de escribir que, según creamos que pasa una cosa u otra, mi percepción de historia y el mensaje cambia enormemente?

Yo creo que deberíais ver "Kiwi!" (aunque puede que muchos ya lo hayáis visto) y darle un par de vueltas, a ver cuál es vuestra propia conclusión.

Hasta la próxima.

domingo, 13 de julio de 2014

Return of the Reaper - Grave Digger

El disco abre con los compases de la marcha fúnebre de Chopin para acompañar la portada.

Hola de nuevo. Otro disco para comentar...

Grave Digger es una de esas bandas que podríamos llamar de las "casi grandes". Nunca han alcanzado el estatus de superestrellas (al menos yo nunco les he considerado como tal) pero llevan muchos años al servicio del rock y la caña con bastante buen resultado.
Es cierto que tuvieron un bache considerable con "The Last Supper" y "Liberty or Death", pero han sabido remontar y seguir una buena línea hasta desembocar en este, su nuevo trabajo, "Return of the Reaper" ("El regreso del Segador"). Por si alguien anda despistado, "El segador" es la representación antropomórfica de la muerte; sí, el esqueleto con guadaña; y es la imagen del grupo desde su refundación allá por principios de los 90.

Este "Return of the Reaper" nos retrotrae al primer disco que sacaron tras su reaparición, "The Reaper". Este era un disco bastante agresivo con el que supongo que se querían quitar el mal sabor de boca de su fallido intento de "comercialización" (todo por la pasta...) y he de reconocer que no era de mis favoritos de Grave Digger. No estaba mal del todo pero se me hacía un tanto machacón.

Total, que me acerqué a este "Return..." con precaución y, si bien es cierto que tiene muchos temas speedicos con reminiscencias de aquel "The Reaper", también tiene muchos otros de corte más rockero y un par más lentos.
Lo agradezco, porque esto lo hace un disco bastante más variado y se me hace mucho más ameno, sin que pierda para nada el toque agresivo al que hacen alusión al titularlo "Return...".

Las canciones, en general, me han gustado más estas que las de "The Reaper". Veinte años de experiencia escribiendo canciones se tienen que notar, o quizá ahora tengan más medios para hacer unos coros llamativos y mejorar la producción (la del "Reaper" no es que estuviera mal, pero no me gustaba el tono de la guitarra, que se me hacía un poco estridente), o una mezcla de todo ello.

También muy importante es que la voz de Chris Boltendahl me ha ido gustando más con el paso de los años. Lo mismo que con las guitarras, antes se me hacía un tanto estridente y yo creo que ahora ha encontrado un tono más apropiado. Quizá es que con la vejez se la ha agravado un tanto pero, si es así, la vejez le ha sentado muy bien.

Las canciones están bastante bien (algún altibajo, pero nada grave), con energía, ambiente entre frenético y siniestro, coros chulos y estribillos pegadizos (¡y eso que a "Grave Desecrator" le falta una sílaba!; me remito a la canción).

Vamos, de estos discos sólidos que no te lanzan al estrellato pero que son muy agradables de escuchar para los metaleros más clásicos.
Otro paso en la buena dirección para esta veterana banda alemana.

P.D: en "Día de los Muertos" queda demostrado que los alemanes tienen problemas para pronunciar los diptongos en español (por supuesto, ya me gustaría a mí hablar así el alemán...).

viernes, 11 de julio de 2014

Echoes of Battle - Caladan Brood

La portada ya crea un ambiente místico y grandioso.

The bones of beasts and the bones of kings
Become dust in the wake of the hymn
Mighty kingdoms rise, but they all will fall

No more than a breath on the wind

Hola de nuevo. Hoy os vuelvo a traer un disco de las recientes incorporaciones a mi colección, "Echoes of Battle", primer álbum de la banda americana "Caladan Brood".

Igual algunos estáis pensando, "¿Caladan Brood, como el personaje de la serie de Malaz de Steven Erikson?". Pues sí, todo el disco está basado en dicha serie, aunque no podré valorar lo acertado de la adaptación dado que sólo aguanté doscientas páginas antes de decidir que tenía cosas mejores que hacer que leer al autoproclamado salvador del género de la fantasía épica. Algún día lo volveré a intentar...

Por suerte escuché el disco antes de saber en qué estaba basado, así que me acerqué sin prejuicios y lo que encontré me sorprendió muy gratamente.

Este se engloba en lo que se llama Epic Black Metal, género que a mi entender tiene más de Epic que de Black (aunque ni soy un entendido ni me quita el sueño lo de las etiquetas).
Esto quiere decir que vamos a encontrar mucha orquestación, teclado, melodías diversas y coros de voz limpia acompañando a la voz gutural y la guitarra con distorsión (mucho trémolo y acordes largos, con algunos solos dispersos para animar), dándole un enfoque muy ambiental.
Con esto quiero decir que se centran más en crear una atmósfera épica medieval (incluso mágica, si no queda un poco ñoño) que en el riff puro y duro.

Para crear más ambiente ahí tenemos los títulos de las canciones, como "To Walk the Ashes of Dead Empires" ("Caminar sobre las cenizas de imperios muertos").

Yo creo que consiguen su objetivo y me transportan a esos otros tiempos y otros lugares. Ahí reside la gran fuerza de este disco y por eso me gusta.

Lo que a algunos os puede tirar para atrás es la gran duración de las canciones (la más corta dura 9:22) y una cierta repetición de las melodías a lo largo de cada canción.
Son canciones para escuchar sin ningún tipo de prisa, que evolucionan lentamente, y hay que tenerlo en mente al enfrentarse con este "Echoes of Battle".
A mí no me molesta, pero supongo que puede haber gente a la que no le convenza, así que avisados estáis.

Ahora que ya he hecho mi pequeño comentario voy a la explicación fácil para los que ya sepan algo de este tipo de música: son muy, muy parecidos a "Summmoning" ("Dol Guldur", "Let Mortal Heroes Sing Your Fame", etc.).

Y con esto y un bizcocho hasta la siguiente entrada.

lunes, 7 de julio de 2014

Epic

Como veis es una película bastante dicotómica.
En un lado la luz y los gasterópodos sonrientes y en el otro,
la oscuridad y los cuervos amenazantes.
Hola de nuevo. Esta vez os traigo una película que el año pasado seguí por el rabillo del ojo pero que no había podido ver hasta fechas muy recientes, "Epic".
Bueno, en España se llama: "Epic: el reino secreto"; otra vez lo de los título, pero esta vez en plan internacional. El premio se lo lleva Croacia, si no me engaña el Google Translator, con: "Guardianes del bosque: el mundo misterioso".

En fin, la llamemos como la llamemos lo que encontraremos en esta película es la lucha titánica entre la "facción de la vida" y la de la "muerte" por el control del bosque.
Esta "facción de la vida" está representada por toda una suerte de diminutos seres vegetales animados, liderada por la Reina Tara (de aspecto muy poco vegetal) y sus tropas, los Hombres Hoja (una mezcla de elfos y Japón feudal).
La Reina Tara. Todo luz y color.
La "muerte", "oscuridad", o como queráis llamarla, está encabezada por Mandrake y su ejército de Boggans, pequeños monstruos de forma variopinta, difíciles de generalizar.
La capa de murciélago de Mandrake es siniestra, pero mola.
Mezclada en todo esto se mezclarán MK (Mary Katherine), una humana normal y corriente cuyo padre (el profesor Bomba) vive obsesionado con encontrar a estos minúsculos habitantes del bosque y Nod, un ex Hombre Hoja alegre y despreocupado.

Como estaría feo que revelara más de la cuenta me voy a centrar en los puntos no argumentales de la película.

Empezaré por el final... ¿La película está bien?
A mí el resultado final me satisfizo más de lo esperado porque los puntos interesantes me resultaron interesantes y hubo muchas cosas que me gustaron pero, y aquí viene un señor "pero", buena parte de la película se mueve sobre los railes de lo que se espera de este tipo de películas familiares.
Chica conoce chico... ya os imagináis el resto.
Por ejemplo, la relación de la Reina Tara y Ronin, líder de los Hombres Hoja, estaba bien y yo creo que se podía haber desarrollado más.
La relación de MK y Nod se basa en que el "Manual del Buen Guionista" dice que hay que liar a los protagonistas.
El mismo Manual dice que los malos "bla, bla, bla" y los buenos "bli, bli, bli", así que sin haber dicho nada ya os he contado cómo acaba la película. No os preocupéis, a mitad de metraje ya lo habréis deducido más que de sobra.
Predecible, sí, mucho. Y es una lástima, porque hay momentos en los que parece que la película va a ofrecer aún más de lo que al final vemos.

Por otro lado, nos da lo que se suele pedir a este tipo de cintas, así que si os gustan (secundarios cómicos incluidos) estaréis en vuestra salsa.

En algunos momentos parece que se hace un poco lenta pero podemos entretenernos viendo los paisajes, que son preciosistas y llenos de color, hasta que vuelve el movimiento y la acción, que por cierto me pareció bastante aceptable.

¿No está pasando nada? A ver el paisaje...
Para resumir, el bien y el mal (luz/oscuridad, vida/muerte, etc.) se enfrentan en un entorno realmente hermoso, surgen nuevos héroes, hay bofetadas varias y todo acaba como tiene que acabar, pero la película tiene un je ne sais quoi que la diferencia del resto de películas en las que pasa exactamente lo mismo. 

Quizá es que hay más acción y la gente muere (sin sangre, que es para niños, pero muere), o que apunta a unos personajes más profundos de lo que luego desarrolla (pero sabemos que están ahí, y nosostros llenamos los huecos), o será porque el perro del profesor Bomba es cojo y tuerto, o será porque aparecen elfos samurai montados en colibrís...
Eso sí que tenemos que reconocerlo, ¿puede haber algo más guay que un elfo samurai en un colibrí?

Épico.
Pues eso, sí queréis ver la película de animación de siempre, o la película de siempre pero un poco distinta, creo que no perderéis nada por probar esta "Epic".
Si buscáis otra cosa estáis buscando en el sitio equivocado.

Hasta la próxima...

jueves, 3 de julio de 2014

Tim Burton

Nuestro amigo, Tim Burton.
Hola, amigos. No hace demasiado os comenté cuatro cosas de “Sleepy Hollow”, la película de Tim Burton. Una cosa lleva a la otra y me quedé pensando en el bueno de Tim. Total, que aquí tenéis el resultado de dichas reflexiones.

Timothy Walter Burton es un conocido director de cine del que seguro que todos habéis oído hablar y, posiblemente, habéis visto alguna de sus películas, por no decir unas cuantas.

“Ya… Y además de no peinarse, ¿qué ofrece?”
Pues si tuviéramos que encontrar un nexo a todas sus películas sería una imaginación desbordante y una estética muy particular, que puede ser muy colorista como en “Edward Scissorhands” (“Eduardo Manostijeras”) o más gótica y siniestra, como en la mencionada “Sleepy Hollow” o “Sweeney Todd”.

Es interesante saber que no escribe todas sus películas, pero siempre imprime su particular mundo en ellas. Yo creo que esto nos lleva a una filmografía irregular, sobre todo cuando dirige por encargo, como en “Planet of the Apes” (“El planeta de los simios”) o “Alice in Wonderland” (“Alicia en el País de las maravillas”). Estas las encuentro especialmente flojas…
Especialmente interesante es remarcar que escribió pero no dirigió la celebérrima “The Nightmare Before Christmas” (“Pesadilla antes de Navidad”)

Una de sus historias más conocidas, a pesar de no haberla dirigido.

La irregularidad, ahora que lo veo, es la tónica en su carrera. Encontramos medianías como las mencionadas “Planet…” o “Alice…”, junto a “Dark Shadows” (“Sombras tenebrosas”) o “Mars Attacks!” como puntos bajos que contrastan con fábulas encantadoras como “Edward Scissorhands” o “Big Fish”,  o cintas de más oscuras pero entretenidas como “Sleepy Hollow” o las de Batman (que posiblemente no sean tan buenas como las de Nolan, pero no están mal; añadiría que las de Nolan me gustan mucho, pero tampoco son perfectas).
Como punto un poco aparte en cuanto a temática, pero no en cuanto a calidad, tendríamos “Ed Wood”, excelente mezcla de comedia y drama sobre el merecidamente llamado “Peor director de la historia del cine”.

Un jersey de angora rosa para Ed Wood.
En blanco y negro, para ambientar.
Otro punto que tienen en común todas sus películas son los personajes extraños y excéntricos, muchas veces entrañables y siempre sorprendentes. Aquí os podemos citar al ingenuo Edward Scissorhands, al melindroso policía Ichabod Crane de “Sleepy Hollow”, al indescriptible director Ed Wood, a los fascinantes criminales de “Sweeney Todd”, al histriónico Beetlejuice (de la película del mismo nombre, “Bitelchus” en español; el verdadero nombre del fantasma es Betelgeuse, como la estrella)…
Bueno, una variedad infinita de personajes chocantes, como podremos ver en “Big Fish”, que es un verdadero festival de gente epatante.
Por supuesto, muy importante este aspecto es la repetida participación de Johnny Depp, que ya mencioné en el comentario de "Sleepy Hollow" y que no os voy a descubrir a estas alturas.

Johnny Depp como Sweeney Todd, el barbero diabólico de la calle Fleet.
No podemos olvidar la ambientación de sus películas. Siempre muy cuidada, más realista, más oscura o más caricaturesca siempre consigue meterme en la acción y complementa perfectamente la historia.
Seguro que todos tenemos en mente los llamativos colores de los suburbios de “Edward Scissorhands”, el Árbol de los Muertos de “Sleepy Hollow”, las oscuras calles del Londres de “Sweeney Todd”, o el colorista Mundo de los Muertos de “Corpse Bride” (“La novia cadáver”).

En todos los casos tenemos películas muy logradas en el plano visual y estético, con imágenes con mucha fuerza, aderezadas habitualmente por la música de Danny Elfman (músico conocido sus bandas sonoras sobrecogedoras y oscuras, que le viene muy bien al estilo de Burton, y por haber compuesto la entradilla de “The Simpsons”).

Hablando de música... Day-O!
Inolvidable escena de Beetlejuice. El humor es muy importante en el cine de Tim Burton.
Tenemos pues películas imaginativas, con personajes llamativos y una impecable puesta en escena. ¿Fallos? Pues diría que en la mayoría de sus películas hay algún trozo donde divaga, algún fragmento de historia que podríamos saltarnos, es un poco demasiado larga…
Vamos, que no es un gran narrador...
¡No haya pánico, fans de Burton! ¡No me tiréis ladrillos!
Es bueno. No habría hecho carrera si fuera tan malo como, digamos, Uwe Boll… pero no es el mejor director que conozco. Y me duele decirlo, porque admiro mucho su obra y me gusta la mayoría de sus películas pero, después de haberle dado algunas vueltas al tema, creo que es así. Es eficaz pero ni el más dinámico, ni el más conciso.
Teniéndolo todo en cuenta, tiene muchas más virtudes que defectos, pero vamos, también tuvo Hitchcock días malos…

Vincent. El stop-motion no es una técnica desconocida para Burton.

En resumen, ¿a quién vamos a recurrir los fans de lo oscuro, lo gótico, lo soñador y lo fantástico sino a gente como Tim Burton? Es un referente en su género y ha dejado obras que vale la pena revisar otra vez, o al menos una vez, si no las habéis visto ya.

Ah, no me quiero despedir sin recomendaros especialmente “Vincent”, uno de sus primeros cortos, que homenajea al grandísimo Vincent Price, que hace de narrador del mismo.

Hasta otra.