viernes, 29 de abril de 2016

Krampus



Krampus es una figura del folklore germánico que viene a ser un reverso tenebroso de Papá Noel, castigando a los niños que se portan mal (wikiattack!). Esto, evidentemente, tiene un cierto potencial para las historias de misterio y terror, y no es la primera vez que se se le ve en series como Scooby-Doo’ o Grimm’.

Ahora he tenido la ocasión de ver “Krampus”, una película de terror (terror suave, para mayores de 12 años en España) con toques de comedia que, por el tono, me ha recordado bastante a ‘Gremlins’.

Todo comienza con la consabida visita navideña de los familiares más fastidiosos del mundo. El pobre Max es un niño bueno que tiene escrita su carta a Santa, pero toda paciencia tiene un límite y su espíritu navideño es pisoteado por el ataque constante de tan molestos parientes.
(Inciso: si yo viera que a mi hijo le tratan la mitad de mal que a Max, tendría familiares enterrados en el sótano, pero los padres y hermana de Max se ve que tienen sangre de horchata y nadie hace nada. Por otro lado, si atajaran la situación y Max no perdiera la fe en la Navidad no habría película…).

La pérdida de fe de Max es el portal por el que Krampus entra en la película. Le acompaña una tremenda ventisca que mantiene a la familia encerrada en la casa, pero enseguida se verán obligados a salir a buscar a alguien y se darán cuenta de que pasan cosas muy, muy raras y muy, muy peligrosas. Krampus está aquí para castigar su falta de “navideñidad”.

¿En cuantas películas puedes encontrar un muñeco de jengibre berserker en llamas?
Eso le da puntos.

Estos asaltos, como ya he dicho antes, no son especialmente desagradables para el público adulto aficionado a la acción, fantasía y algo a lo siniestro, pero resultan entretenidos. El papel principal en ellos no lo lleva Krampus, sino su ejército de elfos malévolos y juguetes poseídos. Los acompañantes son curiosos y dignos de verse.
Además, todo este peligro servirá para que las familias se conozcan un poco mejor y puedan desarrollar un poco más su relación. No es ‘Kramer contra Kramer’, claro, pero tampoco lo intenta.

Espero que no se considere spoiler pero os aviso que no hay inmunidad de guión en esta película, y eso está muy bien pero, en otro pequeño spoiler, no todas las escenas de acción están bien resueltas, especialmente en el clímax, cuando se recurre al sacrificio completamente innecesario. Si tu familia está a quince segundos del vehículo de huída no les entretengas treinta segundos diciéndoles que tú te quedas a contener a los malos. No tiene sentido y ya está muy visto.
Una de cal y una de arena.

Para finalizar he de decir que el mensaje de la película me queda un poco confuso (tampoco es su punto fuerte).
Se dice que siempre puedes aprender algo de una buena película pero de esta yo me he quedado con:
- “Parientes y trastos viejos,  pocos y lejos”.
- “Es Navidad, sé feliz o muere”.

No es demasiado original en cuanto a su desarrollo, pero si con estas perlas de sabiduría y unos muñecos poseídos asaltando una casa os parece que tenéis una buena combinación, entonces lo podéis pasar bien con ‘Krampus’. A mí no me pareció lo mejor de lo mejor, pero las he visto mucho, mucho peores. Para pasar el rato.


miércoles, 20 de abril de 2016

El Cazador y la Reina del Hielo

Previsible pero inofensiva.

Hola a todos. Hoy tenemos aquí “El Cazador y la Reina del Hielo” cuyo título original es “The Huntsman: Winter's War”. Me salto la parte de “Las crónicas de Blancanieves” porque no me parece que vaya a ningún lado por muy secuela que sea de “Snow White and the Huntsman”, especialmente porque la susodicha no aparece para nada en la película más que de nombre. Yo creo que a alguien se le ha ido la mano a la hora de prepararnos para una tercera entrega.

Total, que esta película comienza antes de los eventos de su predecesora, cuando El Cazador es un niño y, al más puro estilo “Conan, el bárbaro” (la de Milius, claro), es capturado y entrenado para el ejército de Freya, la Reina del Hielo del título, una hechicera obsesionada con destruir todo lo relacionado con el amor y hérmana de Ravenna, la mala de la primera.
El Cazador perderá su amor a manos de Freya (la esposa fallecida que mencionan en “Snow White…” pero recobrará su libertad.
Salto de varios años adelante, Ravenna a muerto pero el mal sigue habitando en el espejo mágico, así que trataran de ocultarlo para siempre. Este plan nunca ha funcionado y no lo va a hacer ahora, el espejo es robado y El Cazador tendrá que ir a buscarlo.
Por supuesto, la búsqueda no será ni corta, ni fácil, pero todos confiamos en el Cazador, ¿no?

La película, como ya os habréis dado cuenta, es de fantasía y aventuras. Por ahí la he visto calificada de fantasía oscura, pero yo no lo veo. Salvo algún punto concreto, es luminosa, bienintencionada y mayormente inofensiva. Hay algo de acción, alguna escena algo sugerente y poco más (mayores de 7 años, creo) así que poca oscuridad debe de haber.

¿Qué sería una aventura sin un romance? No os preocupéis, que lo tenemos también.

Una cosa muy importante que tenemos que tener en cuenta es el público al que va dirigida la película. Es un público que no sabe qué es “Ciudadano Kane”, ni “Blade Runner”, ni siquiera había nacido para ver “Fargo” por lo que, posiblemente, se sorprenda mucho más que yo al ver las “sorpresas” que nos depara la historia. Lo entrecomillo porque, después de haber visto ya una cierta cantidad de películas, puedes esperar la inmensa mayoría de los giros del argumento. Confieso que hay uno que me pilló algo descentrado y entonces me gustó más pero, en general, has visto ya todos los trucos que aparecen, y puede que más de una vez.

Por hacer de abogado del diablo diría que también conozco la historia de Caperucita Roja y no por eso me molesta que me la recuerden de vez en cuando, sobre todo si la cuentan bien.

¿Entonces está bien contada esta historia? Bueno, no, no especialmente. Como ya he dicho es muy predecible y los flecos quedan bastante deshilachados (¿por qué usan diamantes en las lanzas los goblins/mono?, ¿no llevaban armaduras de oro?, ¿cómo es Freya no se da cuenta de determinadas cosas que no puedo revelar?, ¿si su reino es de nieve perpetua, de qué se alimenta su ejército?, ¿en ajedrez está permitido dejar al rey al alcance de una pieza enemiga?) por lo que necesitaréis toda vuestra suspensión de incredulidad.

La montura de la Reina del Hielo no vuelve a aparecer. Podían haber usado un caballo y ahorrar en efectos, pero está de moda usar monturas cuanto más fantásticas mejor.

Por lo demás, hay viajes y aventuras por paisajes muy bonitos (el aspecto visual es bueno), acción y peleas no demasiado tremebundas (editadas más con cortes rápidos que cuidando las coreografías, pero venga, vale), chistes de desigual fortuna (advertencia, hay secundarios cómicos)… Vamos, lo que se puede esperar de esta historia después de haber visto la primera.

Entonces, ¿es una buena película como las que he mencionado anteriormente? No, ¿alguien lo esperaba?
¿Es una mala película? Tampoco diría eso porque, dato importante, he pasado un rato agradable y no me ha hecho daño, cosa que no puedo decir de otras: “Spawn”, las secuelas de “Piratas del Caribe”, “Sucker Punch”, ”Dungeons and Dragons”… La lista es larga.

¿Tienes el espíritu cínico de un sargento veterano en mil películas? Probablemente encontrarás esta completamente innecesaria. Si puedes verla con otros ojos puedes pasar un rato entretenido. Advertidos estáis.

lunes, 18 de abril de 2016

Bone Tomahawk

La portada ya rezuma mitología del Oeste, el viejo sheriff y la partida de búsqueda.

Hola a todos. He podido ver una película que, por motivos que desconozco, ha recibido muy poca distribución en España y puede ser que haya pasado bastante desapercibida para el gran público pese a haber recibido buenas críticas. Se trata de Bone Tomahawk (traducción libre: Hacha de hueso, aunque no he visto ninguna traducción oficial del título).

Por si tenéis curiosidad, la película es una curiosa mezcla de géneros. Es un western, tiene un cierto sentido del humor y es una historia de terror.
El argumento no es excesivamente original, pero resultón. Una tribu de trogloditas caníbales (la sombra de “The Hills Have Eyes” (“Las colinas tienen ojos”) es muy larga)) ha secuestrado a la doctora y al ayudante del sheriff de un pueblo fronterizo, cosa que no hace demasiada gracia ni al sheriff ni al marido de la susodicha doctora, un cowboy de baja por haberse roto la pierna en un tonto accidente.
Junto con el ayudante suplente del sheriff y el dandy local se lanzan todos al rescate.

Así pues, la mayoría de la película se desarrolla como otros tantos westerns, con nuestros héroes viajando, buscando y enfrentándose a lo que el camino y el destino dispongan, mientras se nos desvela el trasfondo de los personajes y se desarrollan las relaciones y rifirrafes entre ellos.
En esto la película se defiende bastante bien, dándonos una historia y unos protagonistas interesantes y un tándem, el sheriff (nuestro bienamado Kurt Russell) y su ayudante suplente (Richard Jenkins, que igual no reconocéis de nombre pero al que habéis visto seguro), realmente entrañable.
Las interpretaciones están muy bien y resultan bastante creíbles, destacando, insisto las de los dos actores más veteranos.

Como en tantas películas del Oeste el ritmo es tranquilo, pero no ofrece pausa y está bien llevado. Pensé que iba a hacérseme más pesada porque dura algo más de dos horas, pero la verdad es que no fue así para nada. Es larga, pero aguanta el tipo sin problemas.

Muy reseñable también el sentido del humor del que hace gala la película, algo negro y más bien irónico (nada de slapstick), pero sorprendentemente efectivo para una historia tan siniestra.

Los cultura/sociedad de los caníbales no resulta demasiado creíble (ya la veréis en la peli), pero es escalofriante, que es de lo que se trata.

En cuanto a la parte de terror es más bien breve, unas cuantas escenas, pero intensa y basada en violencia física y, por ponerlo de alguna forma, un cierto nivel de carnicería. Aviso que es lo suficientemente intensa como para echar para atrás al espectador ocasional. Os remito, como siempre, a la guía parental de la IMDB, donde encontraréis una descripción detallada de lo que podréis ver.

No es “The Searchers” (“Centauros del desierto”) ni “The Wild Bunch (“Grupo salvaje”), de eso no hay duda, pero le da sopas con honda a la inmesa mayoría de cintas de terror que he visto en los últimos años (sí, y a westerns como "Lone Ranger" ("El llanero solitario")), así que debería satisfacer al aficionado a las pelis de miedo o al aficionado al western al que no le importe una ración de la acción más gore.
La mezcla de géneros puede parecer un tanto extraña, sobre todo la inclusión del terror, pero todo encaja bastante bien y se convierte en otro de los atractivos la película así que, si no tenéis problema con ninguno de ellos, os animo a que disfrutéis de ella.

Hasta la próxima.

jueves, 7 de abril de 2016

No Sign of Glory - Blazon Stone

Como una segunda parte de The Battle of Waterloo (Death or Glory).

Si hay entre los presentes alguien que eche de menos los buenos tiempos de Running Wild (a quienes ya hemos mencionado algunas veces) está de enhorabuena. Uno de los proyectos del músico sueco Cederick Forsberg trata de emular exactamente el sonido de esa era clásica que fue entre ‘Under Jolly Roger’ y ‘The Rivalry’ (disco arriba, disco abajo). No en vano lo ha llamado ‘Blazon Stone’, su primer disco Return to Port Royal’ y este que nos ocupa, ‘No Sign of Glory’ (referencias a ‘Blazon Stone’, ‘Port Royal’ y ‘Death or Glory’, todos discos de Running Wild).

La verdad es que si tratara de ocultar el origen de su inspiración, diría que se trata de un plagio descarado de los de Hamburgo, pero al dejar meridianamente claro que se trata de un homenaje y de ocupar el nicho que dejaron vacante ‘Blazon Stone’ se convierte en una muy bienvenida alternativa.

Me voy a dejar llevar por una cierta pereza y voy a suponer que sabéis cómo suena Running Wild. Caso de no saberlo, no haya pánico, os sugiero escuchar alguna canción emblemática, Riding the Storm, por ejemplo, y si no os gusta, os podéis saltar completamente esta entrada, pero si os gusta, oído al parche, porque lo que nos ofrecen es prácticamente un calco y, de hecho, puedes encontrarte muchas veces pensando: “este bajo recuerda a la introducción de Conquistadores” o “esto parece sacado de Powder & Iron”, pero es un calco bien hecho. Quizá las mejores canciones no están a la altura de los Running Wild más inspirados, pero los mejores Blazon Stone tendrían cabida en cualquiera de los discos en los que se inspiran y no desentonarían para nada.

Cederick Forsberg: autor, guitarrista, bajista y batería.
One man band.

La temática también viene a ser la misma que la de sus predecesores: piratas, la libertad de la vida marinera, los males de la codicia y las guerras, un cierto ecologismo y cañonazos a babor y estribor.
Puede parecer un tanto contradictorio que en el mismo disco haya canciones acerca de los horrores de la guerra como ‘No Sign of Glory’ y canciones acerca de la alegría de abordar barcos como ’Fire the Cannons’, pero en contexto todo tiene sentido (posiblemente el resumen es que ‘No Sign of Glory’ trata de tener un mensaje serio y ‘Fire the Cannons’ no, sólo ser divertida).

Cerrando. Si crees Running Wild tuvieron su época pero ya has pasado a otras cosas y buscas otros horizontes, no hace falta que te acerques a estos Blazon Stone, pero si no has dejado de ondear la bandera pirata, puedes tener un par de discos de diversión prácticamente asegurada (y los que saquen, si tenemos suerte).


Hasta la próxima.