viernes, 28 de noviembre de 2014

Crazy Plant Shop

Criaremos plantas simpáticas.

Hola de nuevo. Os traigo muy rápidamente un juego educativo curioso. No es que sea la bomba, pero como va de genética lo he visto con buenos ojos.

Se trata de “Crazy Plant Shop”, que nos pone al frente de una floristería donde criamos las plantas más pintorescas como las que dan perritos calientes o en vez de fruta tienen instrumentos musicales, o forma de gatito.

Para ello tenemos nuestro recombinador genético, que nos permite cruzar dos plantas controlando la herencia de la descendencia. Vendemos las plantas, conseguimos dinero y compramos más plantas o pequeñas mejoras para la tienda.

El recombinador en marcha.
¿Puedes conseguir las plantas que piden los clientes?

La parte estrictamente lúdica es bastante básica, no os creáis que vais a hacer una tienda llena de cosas o que vais a tener que llevar las cuentas. No, el objetivo es, simplemente, completar la colección de plantas del catálogo, lo que resulta bastante sencillo con nuestro recombinador pero lo que habremos conseguido es asentar algunas ideas básicas de la genética mendeliana.

La tienda llena de plantas.

También es genética sencilla, un gen con dos alelos, uno dominante y uno recesivo, por cada rasgo y a recombinar como locos, pero si nunca supisteis por qué a los rubios les llamamos cariñosamente homocigotos recesivos o tenéis pequeños biólogos correteando por casa ahora tenéis la ocasión de pillar algunos conceptos interesantes de forma fácil y amena.

¡Por el juego al conocimiento!

martes, 18 de noviembre de 2014

Hércules

La portada es representativa de lo que vamos a encontrar, muchas horas de gimnasio.

Hola a todos. Aquí os traigo una película que no tuvo mala acogida este verano aunque hay que ver con una cierta precaución. Las cosas como son, Dwayne Johnson hace de Hércules, ¿esperáis el Hamlet de Lawrence Olivier? ¿No? Entonces podemos pasar un rato entretenido.

¿De qué va esto?
Hércules es un mercenario, un paria desterrado por el asesinato de su propia familia que vaga por el mundo acompañado por un grupo de amigos (una amazona, un espartano lanzacuchillos, un berserkerun vidente y un bardo) alquilándose al mejor postor, que en este caso es el rey de Tracia, que ve su reino amenazado por un caudillo para el que faltan insultos para describir.
Bueno, ya os hacéis a la idea que Hércules y sus amigos van a Tracia a desfacer entuertos, llevarse un buen pellizco de oro y resolver sus problemas personales en el proceso, en el que no faltará acción y aventuras, batallas y peleas, traiciones, revelaciones sorprendentes (bueno, sorprendentes, sorprendentes… ¿alguien espera que Hércules sea realmente culpable del asesinato de su familia?) y demás tópicos que podéis esperar de este tipo de películas.

Si creéis que, leído lo leído, podéis predecir el resto de la película andáis perfectamente encaminados porque es bastante previsible, pero no veáis esto como algo muy negativo. Que el sheriff va a tener un duelo final a pleno sol con el bandido no sólo es algo que podemos esperar, sino que es algo que prácticamente exigimos.

Hércules y su banda de mercenarios.
Uno de los puntos más interesantes de la película es cómo trata de enfocar la leyenda de las doce pruebas como una mitificación de hechos mucho más mundanos (por ejemplo, la hidra eran varias personas con yelmos en forma de serpiente) que la banda de Hércules usa como recurso publicitario. Ahora bien, varios de los personajes hacen gala de capacidades sobrehumanas (como la fuerza de Hércules, que manda carros volando de una patada o puede voltear un caballo que pasa galopando a su lado) pero también podéis interpretar que lo que se ve en pantalla es la versión mítica de lo que está pasando realmente.
Si Hércules es realmente hijo de Zeus lo tendréis que decidir vosotros.

Por otro lado, la historia se viene abajo en la parte final, donde las revelaciones son bastante bruscas y no acaba de enlazar todo demasiado bien.

También es evidente que Dwayne Johnson no es Brando pero, ¿qué queréis que os diga? Intenta hacerlo lo mejor posible y como va acompañado de secundarios más solventes, como John Hurt o Rufus Sewell, todo acaba encajando de una forma u otra.

No es una buena película, para nada, eso lo sabíamos todos antes de empezar, pero es entretenida, tiene sus puntos y no trata de ser más de lo que realmente es, por lo que me resulta simpática y se convierte en una buena película (digamos pasable, por no exagerar).

Hasta la próxima. 


P.D.: basada en la novela gráfica “Hercules: The Thracian Wars”, de Radical Comics, aunque parece que hubo algún tipo de desacuerdo con el autor, lo que no es raro en este tipo de adaptaciones.


miércoles, 12 de noviembre de 2014

Cita: Tiempo de odio - Sapkowski

“No sabemos mucho del amor.
Con el amor es como con la pera.
La pera es dulce y tiene forma.
Intentad definir la forma de la pera.”

Me encanta cómo Sapkowski puede comparar temas profundos con las cosas más mundanas y dar en el clavo.

Por si no se nota estoy leyendo más o menos de seguido la saga de Geralt. Seguro que salen otras perlas.

Hasta otra.

martes, 11 de noviembre de 2014

La matanza de Texas

Who will survive and what will be left of them?

Hola de nuevo. Hoy os comento una película que acabo de ver por primera vez, ya que en su día le cogí un poco de miedo, porque seguro que era muy desagradable, no iba a poder dormir bien y todas esas cosas.
Claro que estos prejuicios me vienen de cuando era pequeño y “The Texas Chain Saw Massacre” (“La matanza de Texas”) sonaba como lo más terrible que se podía imaginar… y tengo mucha imaginación.
Muchos años y algunas películas de miedo después me decidí a ver uno de los clásicos del slasher y me alegro de haberlo hecho porque así he podido ver el origen de muchas de las influencias que había visto en otras películas posteriores.

Realmente, si habéis visto unas cuantas películas del género os váis en encontrar en territorio conocido y todo os resultará familiar: grupo de jóvenes perdidos en la América profunda, familia de psicópatas, motosierra, canibalismo…
Todo lo que podéis esperar de este tipo de películas lo encontraréis aquí pero tened en cuenta que la peli es del 74, así que el nivel de sangre es sorprendentemente bajo para los estándares modernos. En mis años mozos me imaginaba que iba a ser, si se me permite la expresión, muy gore y para nada. En la saga de Saw, que por cierto no me gusta aunque la primera tenía un pase, podéis ver diez veces más casquería que aquí.

Imagen icónica.

Lo que tiene “The Texas Chain Saw Massacre” y falta en otros títulos más modernos es ambiente. Un ambiente enfermizo y enloquecido lo impregna todo y no te lo puedes quitar de encima, magnificado por un excelente uso del sonido que me hizo respirar bastante aliviado cuando acabaron los gritos y el chirrido de la motosierra.
No es que moleste porque sea una película ruidosa, no es eso, es que crea una sensación realmente perturbadora con todo ese caos sonoro que, al menos a mí, me funcionó.

El ritmo es también más pausado que en las cintas más modernas, pero tampoco es mayor problema porque, como acabo de decir, eso ayuda a crear una atmófera malsana que de darle mayor velocidad acabaría todo en una serie de carreras y sustos sin sentido.

Las camisas de los 70 sí que daban miedo...

Bueno, además de ser una historia sobrecogedora y desagradable, también nos lanzan algunos temas de interés social como el desempleo generado por la nueva maquinaria que deja obsoletos ciertos puestos de trabajo y cómo afecta esto a zonas más rurales o deprimidas, o el vegetarianismo. No es humor negro, aunque de eso hay algunas pinceladas (aunque no lo parezca), es que realmente uno de los temas de la historia es acerca de si es ético el consumo de animales.

En definitiva, es una de esas películas que hay que ver porque te ayudan a comprender de dónde venimos y por qué ahora vemos lo que vemos (cinematográficamente, se entiende) o, sencillamente, porque es una buena película de terror y este es un género donde no siempre es fácil encontrar películas interesantes.

Hasta la próxima.

lunes, 3 de noviembre de 2014

Al encuentro de Mr. Banks

Paralelismos. Fundamentales la película.

Hola a todos. Esta vez os traigo otra película de la factoría Disney y reparto estelar, “Saving Mr. Banks”.

Allá por 1961 Walt Disney llevaba veinte años pidiendo a la escritora P. L. Travers los derechos de su personaje, Mary Poppins, para poder rodar la película que seguro que todos habéis visto (y si no, ya estáis tardando). Hete aquí que acuciada por problemas financieros Travers se ve obligada a aceptar la propuesta y viaja a los estudios Disney en Hollywood para supervisar el proceso de creación del famoso film, no fuera que estropeasen su personaje con canciones, animación y otras ñoñerías por las que es conocida la productora del ratón.

Walt, todo simpatía.

Travers se muestra extremadamente recelosa y cerrada frente a cualquier cambio respecto a lo que ella escribió, lo que dificulta seriamente el desarrollo del guión para pasmo y frustración de los trabajadores de la productora, incluyendo al mismo Disney (o Walt como insiste en ser llamado).
Afortunadamente nosotros podemos ver el por qué de tal rechazo en la línea argumental paralela que tiene lugar en la infancia de la autora, en Australia a principios del siglo XX.
Aunque se podrían clasificar como flashbacks, dada cantidad y duración yo os los planteo como otra línea argumental, para que no os llevéis a engaño.

Travers. ¿A que tengo cara de borde?

Rápidamente nos daremos cuenta de que todos los pequeños detalles que tanto revuelo causan en el presente vienen de pequeños pero significativos detalles de su infancia y especialmente de la relación con su padre, un buen hombre pero alcohólico y profesionalmente fracasado.

“Saving Mr. Banks” se desarrolla entonces en dos frentes; el de su infancia, donde se centra en una difícil figura paterna y el actual, donde vemos los resultados de todos aquellos eventos.

Por supuesto, a medida que avanza a trompicones la creación de “Mary Poppins” irá cambiando la actitud de Travers y comenzará a aceptar su pasado y empezará a ver a su padre desde otra perspectiva. De esta forma, se establece un paralelismo evidente entre cómo Mary Poppins salva al señor Banks en la ficción y el señor Travers se ve salvado a través de la relación que establece su hija con la buena gente de la Disney.
Os puede parecer que os estoy revelando ya demasiado pero, creedme, no es nada que no veáis venir desde el momento en que aparece Tom Hanks como Walt Disney. Desde el primer momento es evidente que Walt y su equipo valen lo que cien horas de psicólogo.

El "auténtico" señor Banks.

Por lo tanto esta es una película sobre familia y sentimientos enmarcada en la producción de la película de “Mary Poppins”. Es dulzona y podría resultar empalagosa para según qué público. Habiéndola visto sólo una vez me pareció que recorre habilmente el límite de la diabetes pero no llega a caer en ella, lo que agradezco enormemente.

Para que la película se sostenga en imposible no tener en cuenta las actuaciones de un reparto, como decía al principio, muy notable con la gran Emma Thompson a la cabeza, como P. L. Travers; Tom Hanks (al que no le tengo demasiada simpatía), como Walt Disney; Colin Farrell, como papá Travers… Bueno, mucha gente y lo mejor es que están todos muy bien (tanto principales como secundarios) y llevan la película a buen puerto.

Es bonita y es emotiva aunque, francamente, parece bastante falsa. No pongo en duda que parte de los eventos sucedieran así pero incluso antes de haber leído nada al respecto, ya resultaba evidente que todo resultaba demasiado bonito, demasiado simétrico, todo encajaba con demasiada precisión como para resultar del todo creíble. La vida no funciona así.
De todas formas la equipararía a una comedia romántica, sabemos que nos miente, pero no nos importa porque es lo que queremos al verla.
No creáis que és una película 100% biográfica. Está inspirada por aquellos hechos y los adapta para contar una historia que, si bien no fue real, bien mereció haberlo sido. Parafraseando a Alfred (el de Batman), a veces la verdad no es suficiente.

Mención especial a los hermanos Sherman, compositores de la banda sonora de Mary Poppins.
Bravo.

Como curiosidad final haceros notar que el título en español es “Al encuentro de Mr. Banks” que pierde el significado de su título original “Salvando a Mr. Banks”, que es de lo que realmente va la peli. Otra traducción inexplicable.

Lo dicho, sabemos que está edulcorada pero si es el juego en el que queréis entrar no os arrepentiréis de darle una oportunidad al señor Banks.