miércoles, 25 de junio de 2014

Sleepy Hollow (1999)

El Árbol de los Muertos, el Germano y Daredevil (un caballo sevillano, por cierto).
Hola a todos. Por motivos diversos ayer volví a ver “Sleepy Hollow”, la película de Tim Burton y, por si alguien no la ha visto, aquí os dejo cuatro pinceladas.

Por supuesto está inspirada por el relato “The Legend of Sleepy Hollow” (Washington Irving) pero no es para nada una adaptación del mismo a la pantalla. Coge algunos hechos y personajes para crear su propia historia.

La película trata de la investigación que Ichabod Crane, policía de Nueva York, lleva a cabo en el pequeño pueblo de Sleepy Hollow, en el que varias personas han muerto decapitadas.
En el pueblo todos dan por sentado que el responsable es el Jinete sin Cabeza, un mercenario germano que murió durante la Guerra de Independencia, y que ha vuelto de la tumba…

Famoso fotograma del Jinete en acción.
Esta es una historia de misterio, acción y fantasía oscura. No es de miedo pero hay violencia (muchas decapitaciones, sobre todo). Está calificada para “mayores de 13 años” si os sirve para haceros a la idea de por dónde van los tiros. Ahora bien, también hay romance (que le come bastante terreno a la investigación en sí) y unas pequeñas dosis de humor bastante acertadas.

El punto fuerte de esta película es, sin duda, la puesta en escena, La ambientación es espectacular, el vestuario, los decorados... La atmósfera es sombría pero fascinante y todo desemboca en una película que visualmente tiene mucha fuerza. Por supuesto la música de Danny Elfman (un colaborador habitual de Burton) acompaña perfectamente.

También brilla con luz propia Johnny Depp (otro colaborador habitual de Burton), al que no le vamos a descubrir ahora el carisma y la habilidad para interpretar personajes excéntricos. En este caso es el protagonista, el policía Crane, y lo hace divertido en su cobardía y aprensión, y perfectamente serio en sus dudas al chocar su mente racional con los rumores de brujerías y fantasmas (¿habrá de verdad un fantasma sin cabeza o será el casero avaricioso de Scooby Doo?).

Ichabod (Depp) y Katrina (Ricci), con Brom (Van Dien) que no le gusta un pelo cómo le están levantando la novia.
Eso te pasa por ser un actor inexpresivo.
Por último, para los aficionados al terror gótico, la acción o, sencillamente, a las películas entretenidas, la historia da más que de sí para mantenernos interesados y acabar pasando un buen rato.

Pero (voy a poner unos “peros”) es bueno saber que la narración puede resultar un tanto difusa en ocasiones y, sin ser una película especialmente larga (105 minutos según IMDB), yo le metía unos pocos cortes para aligerar esos meandros y la dejaba en 90 minutos que iban a ser un tiro.
También es cierto que a veces abusan de nuestra credulidad (¿de verdad puedes tomar notas aleatorias de cinco hilos de pensamiento distintos y que el resultado sea una frase coherente?).

De todas formas, teniéndolo todo en cuenta, no puedo sino recomendar esta película a los amantes de lo gótico, las aventuras, los fantasmas y los extraños mundos de Tim Burton.

martes, 17 de junio de 2014

American Megafauna

No, la portada no es muy bonita...
Pero la pregunta seguro que es... ¿puedo tener un velociraptor con un arco?
¡Con la expansión, sí!
Hola a todos. Hoy os voy a recomendar un juego que me parece extremadamente interesante y que creo que no es demasiado conocido (al menos no lo he visto en ninguna tienda física y, desde luego, no está traducido). Se trata de American Megafauna (no, esto no lo traduzco).
Hay una nueva versión del mismo llamada Bios: Megafauna pero no tengo la suerte de haberle echado la zarpa encima, así que nos quedaremos con esta primera versión.

Este juego nos pone a dirigir la evolución de un grupo de animales, su crecimiento y expansión por los territorios de América del Norte.

El tablero comienza con unas losetas de territorio predefinidas, pero que irán cambiando según los eventos que vayan saliendo durante la partida.
Estas losetas, llamadas biomas, representan un entorno que ofrece un determinado alimento a los herbívoros pero también exigen unos requerimientos...
¿Tienes el aparato digestivo adecuado para ese tipo de hierba?, ¿no? Pues no puedes entrar.
¿Tienes alguna adaptación "antiarmadura" para poder abrir los moluscos que ofrece el bioma?, ¿no? Pues tendrás que buscar otro que no tenga ningún requerimiento.

Como véis ser un herbívoro no es fácil, porque se empieza sin ninguna adaptación, en el tablero tampoco hay muchos biomas sin requerimientos y estos sólo pueden albergar unas pocas fichas de población (entre 1 y 4), así que habrá que competir por lo poco que hay disponible.
Por supuesto, si consigues una adaptación que te permita aprovechar un tipo de alimento que nadie más tiene, te aseguras una ventaja evolutiva muy importante.

El tablero con las losetas "bioma", las fichas de población...
Pues si ser herbívoro es tan duro, ¡todos carnívoros!
Tampoco tienen una vida fácil, porque dependes de tus compañeros de juego, los herbívoros. Si estos tienen que adaptarse para poder comer en sus biomas, los carnívoros tienen que asegurarse que pueden alimentarse de alguna de las especies en juego.

Los herbívoros tratan de esquivarles con adaptaciones que les dan, por ejemplo, velocidad o armadura, y los carnívoros las contrarrestan con más velocidad o adaptaciones "antiarmadura", como cuernos y colmillos.

Cuantos más biomas tengan disponibles los herbívoros más podrán aumentar su población y lo mismo para los carnívoros, cuantas más presas disponibles, más población.
Esto es crucial porque durante la partida se puntúa dos veces el número de fichas que tenemos en tablero. Al final se suman estas dos puntuaciones y el que más tiene gana. Así de fácil.

No es un juego complicado. Tiene una cierta cantidd de reglas que al menos uno de los jugadores debería conocer bastante bien para que vaya fluido, pero la mecánica tiene poco misterio.
En estas preciosistas hojas llevaremos nuestras especies y sus adaptaciones.
Primero se revela una carta de la reserva, donde podemos encontrar nuevos biomas, adaptaciones por las que podemos pujar con nuestras "monedas-genes", nuevas especies con las que ampliar nuestra población, catástrofes aleatorias que pueden llevar a la extinción a más de una especie despistada...
Os haré notar que el juego ofrece muchísimas más cartas de las que se usan en una partida, así que la rejugabilidad es infinita en este aspecto.

Una vez aplicada la carta (bioma, extinción o inmigrantes) o adquirida en la puja (adaptaciones y especies) nos centramos en el tablero. Todas las especies crecen, migran y compiten por los recursos disponibles.
Para esta competencia hay unas reglas de "desempate" bastante sencillas, pero que hay que tener claras. Al fin y al cabo, la gente se molesta mucho cuando le desaparece la mitad de la población por no haber tenido en cuenta alguno de los factores (como que la presencia de un carnívoro puede decantar la balanza por un herbívoro u otro).

Así irá subiendo y bajando la población de las distintas especies en función de cómo les vaya en la feria.

Por último os comentaré que es un juego muy temático y bien documentado. A un cierto nivel puedes ver la evolución y la ecología en acción (y darte cuenta de que la "Naturaleza" es una chapucera que avanza a salto de mata) jugando a American Megafauna .
Pero como la misma evolución, puede resultar aleatorio y un tanto cruel. Hay muchos factores que escapan a nuestro control, como la aparición y desaparición de biomas del tablero o peor aún, las extinciones masivas.
Por ejemplo, aparece una carta de Catástrofe: Sequía. Todas las especies que tengan tres o más adaptaciones marinas mueren y se retiran del mapa y de un plumazo te puedes despedir de la partida.

Una vez sabes que el juego funciona así tampoco es demasiado grave, porque sabes que a la próxima le puede tocar a otro, pero es conveniente saber que ese factor aleatorio y por ende injusto, existe.

Las fichas venían en estas hojas...
¡Menuda panzada de destroquelar y recortar que me pegué!
Dicho todo esto he de decir que el juego me gusta, y me gusta mucho. Me parece bien pensado y bien llevado a cabo.
Una vez pasas el primer susto de las reglas (¡Dios mío, ¿qué había que hacer si subía el efecto invernadero?!) se puede jugar de forma muy fluida y sin tiempos muertos, y si te puedes tomas con buen humor el ser extinguido porque tu única presa ha desarrollado una cola con pinchos y ya no se deja comer creo puedes disfrutar de un juego tan divertido como interesante e instructivo.

Hasta otra...

P.D: todas las fotos de boardgamegeek.com.
Gloria y agradecimientos a sus autores.


miércoles, 11 de junio de 2014

Trufas de Irene

Hola a todos, hoy os traigo una receta sencilla, y que a pesar de que no me gusta el queso, la encontré buenisima. No se muy bien como llamarlas, pero como me las enseño Irene, pues son las Trufas de Irene.

Creo que debemos aprovechar cualquier momento para poder disfrutar de la cocina, haciendo cosas sencillas, que nos gusten, sean baratas y nos entretengan.

Os recordaran a las Trufitas de Chocolate que ya comentamos hace algún tiempo, ya que la elaboración es similar.

Ingredientes:

1 Paquete de galletas de chocolate y nata, tipo Oreo (pero baratas).
1/2 tarrina de queso de untar.
Chocolate de cobertura negro, con leche o blanco, el que más nos guste.
Fideos de colores, o de chocolate o lo que se nos ocurra para decorar.


Picamos las galletas, o bien dentro de una bolsa les pasamos un rodillo o con la batidora o picadora. Cuando esten bien desechas se quedara como una masa negra, le añadimos el queso de untar, haemos bolitas del tamaño que mas nos apañe y lo dejamos enfriar media hora en la nevera.
Mientras fundimos el chocolate de cobertura.
Pasado el tiempo de enfriamiento, sacamos las bolitas y las cobrimos con el chocolate de cobertura, las decoramos con lo que mas nos guste y las volvemos a meter en la nevera para que se endurezca el chocolate de cobertura.
Y listas para comer cuando mas nos apetezca.

De verdad os digo que no se nota el queso, porque me lo dijeron, que sino, no me entero.

Espero que os gusten, son fáciles de hacer, con los niños os lo podreis pasar muy bien haciendolas y estan muy buenas.

Ya me contais que tal si las haceis.

domingo, 8 de junio de 2014

Creepy

Espectacular gárgola en la portada.

Hola a todos. Hoy quiero hablaros de Creepy. Un cómic por el que siento un especial cariño, a pesar de no haber podido vivir su época dorada por cuestión de edad.


Creepy fue un cómic dirigido al público juvenil, que se publicó durante unos 20 años, de los años 60 a principios de los 80. Cada número ofrecía distintas historias, principalmente de terror aunque esporádicamente había alguna de ciencia ficción o fantasía.
Ahora la podéis volver a encontrar en los tomos recolpilatorios que en España edita Planeta, en tapa dura y a 30 € por tomo, lo que lo convierte en un capricho realmente caro, especialmente si tenemos en cuenta que llevamos 14 tomos y aún vamos por los años 70...

Pero, ¿qué podemos encontrar en estos caros volúmenes? Pues, como ya he dicho, cada tomo contiene distintas historias (20 o 30), de unas pocas páginas cada una (sobre 7 u 8, a ojo), cada una con un guionista y un ilustrador distinto.
Esto hace que la calidad de las historias varíe a veces, especialmente en la época de los altibajos económicos de la antigua editorial.
En cuanto al dibujo encontraréis algunos muy buenos y otros no tanto. Por ejemplo, en el primer tomo podéis encontrar historias ilustradas por el gran Frazetta, mientras que más adelante aparece un tal Williamsune que... bueno, entre ver sus ilustraciones y la muerte me quedo con las ilustraciones, pero...

Siempre encontraremos al Tío Creepy presentando cada historia...
Que esta irregularidad no os asuste porque lo que a veces puede faltar en, digamos calidad literaria, lo compensa con encanto (en serio, ¿cuánta calidad literaria queríais en un cómic juvenil de 35 centavos?).
A pesar de ser un cómic de terror, el hecho de haber sido publicado hace tanto tiempo y con el público joven en mente, hace que las historias tengan una cierta ingenuidad que me resulta muy simpática.
Además, conforme van pasando los años se puede ver la evolución en los 70 hacia una mayor dosis de sangre y picardía... Por supuesto lo que entendemos aquí por sangre y picardía es una auténtica tontería comparado con lo que se puede ver hoy en día en cualquier televisor. Como digo, es una mirada nostálgica a un pasado no tan lejano.


Hombres lobo, vudú... Es un cómic de sabor muy clásico.
En general las historias son interesantes desde un punto de vista de serie B, y yo sé que hay mucha gente que aprecia la serie B, el pulp y las historias del Coyote tanto como la alta literatura. Hay que leer de todo.

No os puedo decir mucho más salvo que siempre paso unos ratos estupendos viendo cómo se levantan los vampiros, con los giros (más o menos) inesperados del final de cada historia y viéndo cómo cambiaba la orientación de las historias conforme cambiaba la sociedad que rodeaba la publicación del original.

La temática puede no ser del agrado de todo el mundo y, sobre todo, el precio puede resultar excesivo pero, aún así, os lo recomiendo.

Hasta la próxima.